«Íbamos bien», me dijo un amigo hace muchos años mientras veíamos una película de guerra que terminó de manera absurda. Creo que podríamos aplicar la misma frase para el hecho de que un trío de diputados de la Concertación presentara durante la semana un proyecto de ley para otorgarle la nacionalidad por gracia a Marcelo Bielsa por haber logrado clasificar al Mundial de Sudáfrica. No dejamos de caer en estas actitudes exitistas y sin fondo, que desnudan lo más burdo de nosotros. El mismo Bielsa rechazó (de manera sutil y pausada, como es su costumbre) la idea.  El tipo, de verdad, no hizo nada extraordinario. Cumplió el trabajo para el cual fue contratado. Nada más y nada menos. Muchas gracias y ojalá siga. Si es que lo hace y se quedara en nuestro país por, que se yo, 10 años y lograra entre otras cosas salir campeón de una Copa del Mundo, una Copa América y mejorarapara siempre la forma de cómo jugar y hacer las cosas en nuestro fútbol, ahí estaría muy de acuerdo en entregarle los mayores honores que nuestro país otorgue. Lo de ahora es un simple exceso. Y oportunismo.

GUAU! pone las cosas en su lugar.

Que tengan un buen fin de semana.

Próxima Actualización: Lunes 19 de Octubre.

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